Espacios de interés natural
En este apartado debemos destacar las zonas más altas del término, que son la montaña de la Tossa y las rocas d’en Xiller, y zonas importantes como la sima de Epifanio y el barranco de Aiguaoliva conocidas por todos los calijenses.
- Montaña de la Tossa
Se encuentra entre los términos de Càlig y Benicarló. Es una montaña de origen cretáceo y supone la última formación montañosa de la sierra de las Talaias. En su cima se encuentran los restos de un asentamiento íbero. Desde su cima (169 metros) se puede ver muy bien toda la plana y todos los pueblos de los alrededores, las islas C olumbretes, el Montsià, el Delta del Ebro y todo el macizo de los Puertos. En la parte posterior de la Tossa y dentro del término de Càlig, hay una sima con una profundidad de 19 metros y un recorrido de 23 metros.
- Rocas d’en Xiller
Situadas dentro de la Rambla de Cervera, a un kilómetro del pueblo rio arriba. Son las rocas que cubren el cauce del río que por la acción de erosión el agua cuando baja, se han formado unos cortes considerables. Es una zona de cascadas cuando baja agua y las rocas han adquirido unas formas bien curiosas y ofrecen un bonito paisaje próximo al pueblo.
- Sima de Epifanio
Situada al norte de la población, a la izquierda de la rambla de Cervera. Se puede acceder por el camino del Pozo Canet, hasta llegar a un roble en la parte izquierda del barranco de la rambla, la sima está a pocos metros del roble.
Es la sima más importante del término catalogada hasta el momento. Tiene una boca de un metro que da lugar a una obertura acampanada de 19 metros, y finaliza en una sala de 11 x 5,5 metros que da a dos galerías laterales.
Otras simas del término son la de la Rambla, pocos metros más abajo que la de Epifanio y a la derecha de la rambla, la de la Tossa, situada detrás de la montaña y la sima del coll de les Forques, que está situada en el borde del camino del pozo de Canet.
- Barranco de Aiguaoliva
Situado al noreste del término, limitando con el término de Vinaròs y Benicarló. Se trata posiblemente del lugar más desconocido y, al mismo tiempo, más valioso del término.
Es un tramo de barranco con un alto valor botánico y paisajístico, donde hay grandes robles (quercus faginea y quercus cerrioides). En esta zona el barranco se encaja con el paisaje y forma un tramo profundo, estrecho y sombroso con especias botánicas de clima fresco y esciófilas. Este tramo está declarado micro-reserva de flora desde el año 2003. Las especias mayoritarias que encontramos son: los nombrados roble valenciano y roble pubescente y las margaritas (Bellis sylvestris, Centaurea linifolia y Cheilorophus intybaceus). Otras especies también importantes son: las violas (viola hirta y viola odorata), el brezo blanco (Erica arborea), se trata de una especie muy poco común en la comarca, y es la única localidad donde se ha encontrado-; el durillo (Viburnum Tinus), el madroño (Arbutus Unedo), el rusco (Ruscus acuelatus), la germandrina (Teucrium botrys), la pistoloquia (Aristolochia paucinervis), etc…